"Las críticas no serán agradables, pero son necesarias". Winston Churchill.

martes, 7 de octubre de 2014

De aquellos barros, vienen estos lodos

Hoy, 6 de Octubre de 2014, se ha producido la noticia que nadie quería escuchar relacionada con el virus Ébola, por las terribles consecuencias que puede traer. A media tarde hora española, se hacía público el primer caso de contagio fuera de África. Y sí, ha sido en España. Una auxiliar de enfermería gallega, de 40 años, es la desgraciada protagonista, la cual fue una de las 30 personas que trató en el Hospital Carlos III de Madrid a los dos sacerdotes españoles infectados en Liberia y Sierra Leona. Ambos fueron repatriados en los últimos meses a España para ser tratados, pero finalmente fallecieron. La mujer comenzó a notar síntomas el 30 de Septiembre, y hoy ya en el primer análisis dio positivo. El segundo lo confirmó.

Una desgracia de esta magnitud exige de grandes responsables. Toca mirar arriba. Sin dejar de lado la responsabilidad que seguro también tendrán los altos cargos del Hospital y los jefes de departamento correspondientes, las miradas deben ir al Ministerio de Sanidad. A finales de 2011, Ana Mato fue nombrada Ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, y en concreto esta era la Sanidad que recogía, según un informe publicado en 2010 por la revista norteamericana Newsweek:


Pues bien, su gestión durante estos casi 3 años no ha podido ser más desastrosa. El sistema sanitario ha sido, junto al educativo, uno de los sectores que más ha sufrido los recortes que el Gobierno de Rajoy lleva aplicando durante toda esta legislatura. Menos mal que en su programa electoral nos prometieron que esos eran los dos pilares que no se iban a tocar… Un sistema sanitario que presumía de ser público, universal y gratuito se ha ido degradando completamente, con cada vez menos dinero invertido, la aparición de los copagos farmacéuticos, la reducción de personal y material médico en hospitales, las largas listas de espera,…etc. Por si fuera poco, el nombre de la Ministra también ha aparecido en las investigaciones de la famosa “Trama Gürtel”, el caso de corrupción que se ha convertido en un auténtico cáncer para el PP. Pero lo más alarmante es que todo este historial ya lo tenía a sus espaldas apenas unos meses después de entrar en el Gobierno, como le recordaban en el Congreso hace ya año y medio:



Como podemos ver, el caso del Ébola ha sido sólo la punta de un enorme iceberg. Iceberg o bola de nieve, lo que prefiráis. Una bola que cada vez es más grande y que cae cuesta abajo como lo hace nuestro país. Un país donde cada vez la gente lo pasa peor, con menos clase media y más pobreza, pero donde las grandes fortunas cada vez tienen más dinero. Increíble. En cualquier país medianamente serio ya habría habido dimisiones, pero esto es España señores. Aquí nadie dimite. La incompetencia parece no tener castigo, y eso en un político debería ser imperdonable. Estoy de acuerdo con Madina: esta señora (como muchos de sus compañeros) debería estar fuera del Gobierno desde hace ya meses. Pero nada, ahí sigue. Y ahí sigue aún a estas horas, 10 después ya de que se haya conocido el primer contagio de Ébola fuera de África. Y sí, ha sido en España. Nada ocurre por casualidad.